Sí, su debut The Creek Drank the Cradle marcó un interesante inicio. Estoy de acuerdo que su segundo LP Our Endless Numbered Days es un cautivante viaje a través del mundo del folk. Sus apariciones esporádicas, como el afligido cóver de "Waiting for a Superman" de los Flaming Lips, no podrían ser mejores. El EP In the Reins, en conjunto con Calexico, me pareció la refrescante confirmación que dos fenómenos de la música indie pueden colaborar y complementarse a la perfección. Finalmente, Woman King, su más reciente EP, incluye una de mis canciones favoritas, "Jezebel".
Sam Beam, mejor conocido como Iron & Wine, es uno de esos músicos con una carrera impecable que, en teoría, debería estar en mi lista de all-time favorites. Sin embargo, a pesar de seguirlo de cerca y haber comprado sus discos, su música nunca logró afectarme profundamente: siempre faltaba algo. Hasta ahora.
Al escuchar por primera vez las canciones de su futuro LP The Shepherd's Dog, todo a mi alrededor se detuvo al instante. Es uno de esos discos magistrales que, con sus instrumentos acústicos y sus vocales susurradas, nos deja atónitos ante las cantidad de emociones que transmite. Con una producción más variada de lo acostumbrado pero conservando los textos crípticos, el álbum te envuelve de principio a fin; aquí, al igual que en los mejores instantes de Bonnie 'Prince' Billy, queda la impresión que lo mejor es lo que no se dijo, lo que circula por debajo de las canciones.
Habrá que esperar hasta finales de septiembre para tenerlo (bajo Sub Pop, como siempre), pero aquí algunos momentos de este álbum que, al menos para mí, ya es trascendental.
Iron & Wine - Resurrection Fern [link1] [link2] (buy)
Iron & Wine - House by the Sea [link1] [link2] (buy)
Iron & Wine - White Tooth Man [link1] [link2] (buy)
Update: Por amable petición de Sub Pop, tuvimos que dar de baja los links. De todos modos, puedes escuchar el fantástico primer sencillo "Boy with a Coin" desde aquí: [stream].